
Visitas organizadas al campo de concentración de Majdanek
El eterno campo de concentración. Siempre en obras. Quizá éste sería el mejor calificativo para el campo de concentración de Majdanek. Y es que este campo de exterminio construido por la Alemania nazi en Polonia estuvo siempre en obras.
🔴 Majdanek con guía privado – 🚐 Desde Varsovia 🛒 RESERVAR
🔴 Lublin + Majdanek privado – 🚐 Desde Varsovia 🛒 RESERVAR
Tal vez este detalle resulte algo inusual teniendo en cuenta que los nazis empleaban a sus prisioneros para obrar en los campos de concentración, por lo que resulta curioso conocer que hubo un lugar de exterminio que nunca se terminó. La razón es bien sencilla. Los prisioneros que se alojaron en esta zona durante la Guerra Mundial estaban siempre demasiado débiles para trabajar. De ahí que fuera uno de los campos de concentración inconclusos de la época nazi.
De 1941 a 1942
¿Sabes cuándo comenzó la construcción del campo de concentración de Majdanek? Justamente en 1941. Su construcción dio inicio en ese año con la llegada de unos 2.000 prisioneros de guerra soviéticos, pero un año más tarde, en 1942, apenas habían avanzado las obras. Resulta que en 1942 la mayoría de los prisioneros soviéticos estaban prácticamente todos muertos, por lo que los trabajos para levantar el recinto se ralentizaron bastante.
Ante tal panorama, ¿cuál era la vía de escape para que el campo de concentración siguiera funcionando? Reclutar a más presos. Fue entonces cuando se reclutaron presos judíos procedentes del campo de Lublin a fin de que echaran una mano en los trabajos forzados y ayudaran a construir el campo de concentración.
Las autoridades nazis no tardaron en reclutar a judíos. A finales de 1941 encarcelaron a cerca de unos trescientos, de los cuales seleccionaron a unos 150 para ser encarcelados en Majdanek, se convirtieron así pues en los primeros prisioneros judíos de este campo de concentración.
Condiciones letales y fusilamientos masivos
Aunque no es fácil de imaginar cuáles fueron las condiciones de los campos de concentración, sí es cierto que en todos ellos fueron letales. En Majdanek, en concreto, los peores años fueron los primeros, es decir 1941 y 1942. En eso no solo tuvieron que ver los alemanes, sino también las condiciones meteorológicas a las que se enfrentaron los prisioneros.
El frío invierno de 1941-1942 hizo a los nazis replantearse si los presos eran aptos o no para trabajar. Esto les llevó a exterminar a la mayoría de ellos por ser, según consideraban, demasiado débiles para trabajar. Para ello se los llevaron a las afueras del campo de concentración, al bosque de Krepiecki, al norte de Lublin,donde los asesinaron sin piedad.
Una posible ‘solución’ final
En vista de que el campo de concentración nunca terminaría de construirse, los nazis decidieron derivar presos de otros campos de concentración a Majdanek. Entre el 29 de marzo y mediados de junio de 1942, alrededor de 7.000 judíos eslovacos con rumbo a Auschwitz y Belzec fueron desviados a Majdanek. Lo mismo ocurrió ese mismo año con 2.000 judíos checos de los trenes que los llevaban desde Theresienstadt al distrito de Lublin, y los enviaron a Majdanek para que realizaran trabajos forzados.
Ya en 1943, después de que los alemanes destruyeran el gueto de Varsovia, los funcionarios de las SS y la policía derivaron a Majdanek entre 18.000 y 22.000 sobrevivientes de la sublevación para que realizaran trabajos forzados. El objetivo de esta decisión era que los prisioneros trabajaran para el beneficio de un nuevo sistema de despliegue de trabajo de las SS alemanas.
Al parecer durante todo el tiempo que duró la guerra, pasaron por Majdanek entre 74.000 y 90.000 judíos.
Sin muros de seguridad
En Polonia hay unos seis campos de concentración construidos por los nazis, uno de ellos es Majdanek. Y es, también, el campo de exterminio menos conocido de todos. Situado a 4 kilómetros de la ciudad de Lublin, se encuentra en una zona plana que puede verse desde todas partes. No es un campo de concentración al uso escondico en alguna zona boscosa o similar. De hecho, también carece de los típicos muros de seguridad de otros campos de exterminio. Cuando los presos llegaban a Lublin eran trasladados a Majdanek en camiones.
El principal objetivo del campo de concentración era albergar al mayor número de presos posibles. De hecho, en los registros que se han encontrado aparece como número objetivo que la zona albergara a más de 250.000 prisioneros. Un número desorbitado.
A pesar de que la zona siempre estuvo en obras, este campo de concentración llegó a tener 270 hectáreas de superficie en las que se incluían barracones para los presos, edificios administrativos y de producción, talleres, torres de vigilancia, almacenes y habitáculos para llevar a cabo el exterminio de los presos, tales como cámaras de gas y crematorios, comunes en todos los campos de concentración.
La población de Lublin ha crecido tanto desde la Segunda Guerra Mundial que el campo de concentración ha quedado incluido dentro de la misma ciudad. En él hay un museo y un memorial que recuerda a todas las víctimas de la barbarie nazi. Merece la pena visitarlo por conocer uno de los campos de exterminio menos conocidos.
Reservar visita organizada al Campo de Majdanek
Reserva ahora tu visita con los mejores operadores locales